VOCALIZACIONES TÍPICAS
DE AVES SILVESTRES EN EL
VALLE SUR DEL CUSCO
José Luis Venero Gomales y José Israel Aragón Romero
GENERALIDADES
El conocimiento del denominado
Valle
Sur del
Cusco se convierte en una necesidad y se advierte
quea aa adquiere mayor interés en vista de que
el entorno natural es objeto de grandes agresiones
por parte de los habitantes citadinos, en desmedro
de los valores naturales que contiene el área.
Si bien desde hace algún tiempo atrás hay un
latente interés por dedicar esfuerzos en beneficio
de su conservación, también son cada vezs
notorios los efectos de su paulatina destrucción;
primero, por el excesivo afán de incrementar
el área de los suelos cultivables; luego el afán
expansionista de las áreas construidas, y finalmente
la procura de ambientes propicios para establecer
servicios pensados para satisfacer la gran demanda
turística que cadaa ess creciente en la región
Cusco. Por otro lado, dentro de la fauna andina
uno de los principales componentes naturales del
bioma lo constituye la clase de las aves, cuyo valor
científico en la actualidad resulta indiscutible.
En ese sentido, el conocimiento de la fauna,
específicamente auifauna silvestre ha tomado un
carácter de primera importancia, puesto que no
solo se ve alterada en los alrededores de la ciudad
sino que los efectos ambientales sons notables
y negativosa a día.
La ejecución de obras que transforman
la naturaleza, bajo el malentendido
progreso,
no
solo alteran el ecosistema, sino que ponen en
riesgo al área en general y su importancia para la
supervivencia de las aves residentes, sin descontar
el efecto en las especies migratorias, ocasionales y
temporales (Venero, 2008).
Ahora ya no resulta raro el comentario de
los pobladores, tanto en las ciudades como en las
áreas rurales, que cadaa ess raro escuchar
el canto de las aves, aspecto resultante de uno los
factores naturales alterados como consecuencia de
la contaminación acústica.
Palabras clave:
Aves, ornitología, vocalizaciones,
conservación, ecoturismo.
MARCO TEÓRICO
La taxonomía es una parte de las ciencias
biológicas que permite determinar a las especies.
De acuerdo a esta definición, para reconocer
una especie existe la posibilidad del uso de la
morfología, el ADN. En el caso de las aves, se da
por las vocalizaciones que emiten, método cuyo
auge va ocupando un espacio nuevo.
La Etnología contiene un acápite especial
que corresponde a la Etnornitología, definida
como el estudio de las manifestaciones de los
pueblos referidas al valioso recurso de aves dentro
de un ámbito específico, pues la cultura, desde
siempre, acogió a los componentes naturales en
la idea de lo entendido por evolución cultural.
Una muestra de este aspecto se encuentra en dos
libros aparecidos recientemente y que tratan de la
relación de las aves con el ser humano y cómo las
acciones de ellas pueden advertirnos de futuras
amenazas ambientales, pues presentan la historia
de nuestra relación con el grupo de seres alados
s colorido con los que compartimos el planeta,
mostrando aspectos psicológicos, decorativos y de
inspiración, al igual que los beneficios económicos
y ambientales que nos proveen. (Collar, 2007;
Venero 2008)
Finalmente la vocalización denominada
vulgarmente como canto, trino, etc. ha logrado
un significativo espacio en lo que se refiere a la
REVISTA UNIVERSITARIA 141
denominación de las especies de aves en la cultura
andina, siendo así que, en un gran número de
casos, el nombre de una especie viene a ser la
onomatopeya de su emisión. Algunos ejemplos se
incluyen en Venero (1987, 2008).
OBJETIVO
Generar registros gráficos [sonogramas] de
las vocalizaciones de las aves silvestres en el Valle
Sur del Cusco.
METODOLOGÍA
Se ha trabajado durante dos años continuos
registrando las vocalizaciones en forma sostenida,
utilizando un micrófono direccional en una
grabadora de cásete Sony TCM-200DV; los
registros fueron almacenados en casetes y
digitalizados en una computadora. Para la
elaboración de los sonogramas correspondientes
se ha utilizado el programa Syrinx. Todas las
cintas grabadas forman parte de una audioteca
que también está publicada en la red en la página
web www.xeno-canto.org
El método utilizado en la grabación fue de
muestreo infinito o ad libitum (Lehner, 1996), con el
cual se registra todo lo posible, tratando de hacer
las grabaciones a menos de 4 m de distancia el
emisor. En ciertos casos, para confirmar que
los sonidos eran de las especies focales, se usó la
técnica de reproducción de sonidos [playback], con
el parlante incorporado en la grabadora. Para la
determinación visual del emisor de los sonidos se
utilizaron binoculares 10 x 42.
Por último, se entablaron relaciones
amigables con los habitantes del área, que
conocían nuestro propósito y nos permitieron
hacer el trabajo de campo, sin dificultad alguna.
CONSIDERACIONES Y DEFINICIONES
Al estudiar la anatomía de las aves llama
poderosamente la atención la siringe que, en la
formas simple de definición, es el órgano del
canto, constituido por una estructura ósea en el
extremo caudal de la tráquea vertebral, a diferencia
de la laringe en el extremo craneal de la tráquea de
los mamíferos (EDE, 1965).
La siringe y, en ocasiones, un saco aéreo
circundante, resuenan a las vibraciones por
medio de pasos membranosos por donde el ave
fuerza el aire. Ésta controla el tono, cambiando
la tensión en las membranas, y también el tono y
el volumen, cambiando la fuerza de exhalación.
Puede controlar ambos lados de la tráquea
independientemente y, de esta manera, algunas
especies pueden producir dos notas a la vez.
Hay hipótesis que afirman que los cantos
de las aves han evolucionado a través de la
selecáón sexual y con ciertos experimentos sugieren
que la calidad del canto del ave puede ser un
buen indicador del estado físico del individuo.
(Garamszegi et al, 2004; Searcy & Nowicki, 2008;
Marler, 1955).
Otros experimentos proporcionan datos
que permiten sugerir que ciertos parásitos y
enfermedades pueden afectar las características
del canto, como la frecuencia en que sucede; por
tanto, establecen algo así como un indicador
del estado de salud de estas especies (Redpath
et al, 2000).
Y de otro lado, la habilidad de los ejemplares
machos para mantener y proclamar su territorio
utilizando el canto; también podía ser una muestra
de superioridad física respecto a otros individuos
durante la época de apareamiento.
La comunicación a través del 'canto'
puede darse entre individuos de una misma
especie, pero también puede darse entre
individuos de diferentes especies. Así tenemos
que el llamado de acoso es usado para reclutar a
individuos, donde amenaza un depredador. Estos
llamados se caracterizan por tener un amplio
espectro de frecuencia, comienzo y finalización
agudos y repetitividad. Estas características
son comunes entre diferentes especies y se cree
que son útiles a otros acosadores potenciales
por ser de fácil localización. Por otra parte, los
llamados de alarma de muchas especies son
característicamente agudos y difíciles de localizar
con precisión. (Lengagne et al, 2001)
A nivel popular se denomina canto a los
sonidos vocales que emiten estos seres y resultan
ser melodiosos al oído humano. En ornitología, el
canto se diferencia de los sonidos cortos distintivos
a menudo denominados llamados.
Si bien en Física sonido es cualquier
fenómeno que involucre su propagación en
forma de ondas elásticas, audibles o casi audibles,
generalmente a través de un fluido u otro medio
elástico y que esté generado por el movimiento
vibratorio de un cuerpo, en Fisiología se denomina
sonido a la sensación percibida en el órgano del
oído y producida por ese mismo movimiento
ondulatorio. Aun así la diferencia entre canto y
llamado es de alguna manera arbitraria.
Los cantos sons largos y complejos
y están asociados al cortejo y apareamiento,
mientras los llamados tienden a prestar función de
alarma o para mantener junta a la bandada y en
comunicación, haciendo la distinción en base a su
función, (Howell & Webb, 1995); de esta forma,
vocalizaciones cortas como las de las paloma e
incluso, sonidos no vocales como el tamborileo
de los pájaros
carpinteros
o el batido de las alas de
la agachadiza en sus vuelos de exhibición, son
considerados cantos. (Bostwick & Prum, 2005) Sin
embargo, otros autores enfatizan en que el canto
debe poseer diversidad silábica y regularidad
temporal, semejante a los patrones repetitivos y
transformativos que definen la música.
El canto de las aves estás desarrollado
en el
Orden Passeriformes.
La mayoría de los cantos
son emitidoss por los machos que por las
hembras y los emiten desde sitios depercheo aunque
algunas especies pueden hacerlo en vuelo. Algunos
grupos de aves son casi mudas, produciendo
sonidos puramente mecánicos, como las que sólo
traquetean sus picos.
En otras especies, el macho ha desarrollado
varios componentes mecánicos para la producción
de sonidos incluyendo mecanismos para la
estridulación
que no es muy diferente a la de los
insectos. (Manson-Barr & Pye, 1985)
La producción de sonidos a partir de medios
mecánicos, en oposición a los emitidos a través de la
siringe, han sido denominados en ocasiones como
música instrumental por Darwin, sonidos mecánicos
(Bostwick & Prum, 2003) ys recientemente
como
sonatación
(Read, & Weary, 1990).
El término sonata ha sido definido como el
acto de producir sonidos no vocales con la intención
de modular señales comunicativas, producidas sin
utilizar la siringe, tales como el pico, las alas, cola,
patas y plumas del cuerpo.
Individualmente, las aves pueden ser
suficientemente sensibles para identificarse entre sí
por medio de los cantos. Muchas de las aves que
anidan formando colonias pueden localizar a sus
polluelos utilizando sus cantos (Wayne et al, 2002).
En ocasiones, los cantos no son
suficientemente distintivos de un individuo a
otro como para ser identificados, inclusive por
investigadores humanos durante la realización de
estudios ecológicos (Thorpe, 1963).
Algunas aves realizan llamados a dúo,
en algunos casos los duetos están tan bien
coordinados en temporalidad que parecen un solo
canto. Este tipo de llamado se denomina "dueto
antifonal". (Stokes & Williams, 1968; Aragón &
Venero, 2007). Estas formas de llamado han sido
observadas en un amplio rango de familias, (Harris
& Franklin, 2000; Osmaston, 1941; Pewer, 1966;
Goodale & Kotahama, 2005) la función de estos
llamados orquestales todavía es incierta.
Algunas aves son excelentes imitadoras
de cantos de otras, habiéndose planteado la
hipótesis de que en algunas especies tropicales las
imitaciones pueden jugar un rol importante en la
formación de grupos de alimentación de diferentes
especies. (Suthers & Héctor, 1985).
La capacidad auditiva de las aves está en el rango
que va
desde
por
debajo
de los 50 Hz -infrasónico- a
por encima de los 20 kHz -ultrasónico- con
sensibilidad máxima entre 1 a 5 kHz (Boncoraglio
& Saino, 2007). El rango de frecuencias dentro
del cual las aves realizan sus llamados es variable
dependiendo de la calidad del hábitat y los sonidos
del ambiente. Se ha sugerido que cantos con poco
ancho de banda, bajas frecuencias, modulación de
baja-frecuencia e intervalos inter-elementos largos,
son comúnmente escuchados en los hábitats con
estructuras de vegetación complejas que tienden
a absorber o disipar sonidos, mientras que altas
frecuencias, mayor ancho de banda, modulaciones
de alta-frecuencia (vibraciones) e intervalos inter-
elementos cortos pueden esperarse en los hábitats
abiertos. (Morton, 1975; Krause, 1993).
También se piensa que el rango de frecuencia
disponible está fragmentado para que el traslape
de los cantos entre especies difiera en frecuencia y
tiempo; esta posición ha sido definida como nicho
acústico
(Henrik, 2004).
En las áreas urbanas, donde abundan los
sonidos de baja frecuencia, se ha notado que
las aves tienden a cantar con mayor volumen y
en tonoss altos. (Slabbekoorn & Peet, 2003;
Barrington, 1773).
Los cantos de las diferentes especies de aves
varían y sons o menos característicos de la
especie. En la actualidad, los cantos de las aves
son analizados utilizando espectroscopia acústica.
La complejidad y la cantidad de los diferentes
cantos varía considerablemente de especie a
especie; en algunas se da esta variación incluso
entre individuos mientras que en otras los cantos
integran elementos arbitrarios que los individuos
aprenden durante su vida, como una forma de
mimetismo, aunque un términos adecuado
sería llamarle
apropiación
(Elrich et al), pues el ave
no aparenta pasar físicamente por otra especie.
Desde 1773 se determinó que las aves aprendían
llamados y experimentos por el "cambio de padres"
(Marler & Tamura, 1962).
En muchas especies, a pesar que los
rudimentos del canto parecen ser los mismos para
todos los miembros de la especie, los polluelos
aprenden ciertos detalles del canto de sus padres y
estas variaciones se fortalecen a través de diferentes
generaciones dando origen a diversos dialectos.
(Teramitsu et al, 2004.)
Las aves aprenden cantos desde edades muy
tempranas con sub-vocalizaciones que se convierten
en interpretaciones de los cantos de los adultos.
Hay especies muy populares para investigaciones
en cantos de aves, por desarrollar su versión del
canto de un familiar adulto en alrededor de 20
días, luego de haber salido del cascarón. Alrededor
de 35 días, los polluelos tendrán que aprender
las canciones de los adultos. Las versioness
tempranas del canto son rústicas o variables y le
tomarán al polluelo aproximadamente de dos a
tres meses pulir la canción, haciéndola menos
variable para semejar el canto de aves sexualmente
maduras (Nottebohm, 2004).
Las investigaciones indican que la adquisición
de cantos en las aves es una forma de aprendizaje
motriz que involucra regiones del ganglio basal.
Modelos de este aprendizaje motriz del canto de
las aves son utilizados como esquemas de cómo los
humanos aprenden a hablar. (Nottebohm, 2004).
En algunas especies el aprendizaje de cantos se
limita al primer año, por lo que se les denomina
de aprendizaje limitado por la edad o de fin cercano.
Otras especies en cambio pueden desarrollar
nuevos cantos incluso en la edad adulta; a estos
se les catalogan como de aprendizaje de fin lejano
(Brenowitz, & Beecher, 2005; Slater, 1989).
Conocer el modo en que opera la selección
natural para mantener la habilidad de señales
animales y determinar la naturaleza del resultado
constituye una de las principales cuestiones de
la investigación actual sobre comportamiento
animal. (Searcy & Nowicki, 2008)
A la fecha se conjetura que los cantos
aprendidos permiten el desarrollo de cantoss
complejos a través de la interacción cultural,
permitiendo así dialectos intra especie que
ayudan a que las aves se mantengan unidas con
sus allegados dentro de la especie, y que a la vez
les permita adaptar sus cantos al medio acústico
donde viven (Slater, 1989).
RESULTADOS
A continuación se muestra el listado de las
especies cuyas vocalizaciones registramos. La
taxonomía sigue a Remsen et al (2007).
Orden Anseriformes
Familia I. ANATIDAE
1. Anas
flavirostris
Residente
2. Anas
geórgica
Residente
3. Anas puna Residente
4. Anas
cyanoptera
Residente
5. Oxyura
jamaicensis
Residente
Orden Ciconiformes
Familia II. ARDEIDAE
6.
Nycticorax nycticorax
Residente
Familia III. Threskiornitidae
7.
Plegadis ridgwayi
Residente
Orden Falconiformes
Familia IV. FALCONIDAE
8.
Falco sparverius
Residente
Orden Gruiformes
Familia V. RALLIDAE
9.
Pardirallussanguinolentus
Residente
10.
Gallínula chloropus
Residente
11.
Fúlica ardesiaca
Residente
Orden Charadriformes
Familia VI. CHARADRIIDAE
12.
Vanellus resplendens
Residente
Familia VII. RECURVIROSTRIDAE
13.
Himantopus mexicanus
Migratoria
Familia VIII. SCOLOPACIDAE
14. Tñnga
melanoleuca
Migratoria
15.
Tringafiavipes
Migratoria
16.
Tringa solitaria
Migratoria
17.
Calidris minutilla
Migratoria
18.
Calidris melanotos
Migratoria
Familia IX. LARIDAE
19.
Chroicocephalus serranas
Residente
Orden Columbiformes
Familia X. COLUMBIDAE
20.
Metriopelia ceciliae
Residente
21.
Patagioenas maculosa
Residente
Orden Psittaciformes
Familia XI. PSITTACIDAE
22.
Aratinga mitrata
Ocasional
Orden Apodiformes
Familia XII. TROCHILIDAE
23.
Colibrí coruscans
Residente
24.
Lesbia victoriae
Residente
25.
Lesbia nuna
Residente
26.
Patagona gigas
Residente
27.
Oreonympha nobilis
Residente
Orden Piciformes
Familia XIII. PICIDAE
28.
Colaptes rupicola
Residente
Orden Passeriformes
Familia XIII. FURNARIIDAE
29.
Cinclodesfiiscu
Residente
30.
Phleocryptes melanops
Residente
31.
Asthenes ottonis
Residente
32.
Phacelbdomus striaúceps
Residente
Familia XVI. TYRANNIDAE
33.
Tachuris rubigastra
Residente
34.
Muscisaxicola rufivertex
Residente
35.
Ochthoeca kucophrys
Residente
Familia XV. HIRUNDINIDAE
36.
Tachycineta leucorrhoa
Ocasional
37.
Orochelidon andecolaz
Residente
38.
Orochelidon murina
Migratoria
Familia XVI. TROGLODITIDAE
39.
Troglodytes aedon
Residente
Familia XVII. TURDIDAE
40. Turdus chiguanco Residente
Familia XVIII. THRAUPIDAE
41. Thraupis bonariensis Residente
42. Conirostrum cinereum Residente
43. Diglossa brunneiventris Residente
Familia XIX. EMBERIZIDAE
44. Zonotrichia capensis Residente
45. Phrygilus fruticeti Residente
46. Phrygilus plebejus Residente
47. Phrygilus alaudinus Residente
48. Catamenia analis Residente
Familia XX. CARDINALIDAE
49. Saltator aurantiirostris Residente
Familia XXI. ICTERIDAE
50. Agelasticus thilius Residente
A continuación se muestran los sonogramas
elaborados en base a las grabaciones de campo.
Los datos del son: Clase, Familia, Fotografía, Nombre
Científico y Sonograma.
REVISTA UNIVERSITARIA 141
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CLASES DE AVES /
Orden Anseriformes Familia Anatidae
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SONOGRAMAS
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Orden Ciconiformes Familia Ardeidae
Orden Falconiformes Familia Falconidae
Orden Gruiformes Familia Rallidae
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Familia Scolopacidae
Orden Charadriformes Familia Gharadriidae
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Orden Charadriformes Familia Laridae
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REVISTA UNIVERSITARIA 141
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Familia Turdidae
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REVISTA UNIVERSITARIA 141
CONCLUSIONES
1. El presente estudio reporta el trabajo con un
total de cincuenta especies de aves silvestres
que han sido estudiadas en el Valle Sur del
Cusco, geográficamente ubicado al Sureste
de la ciudad del Cusco.
2. En cada cuadro elaborado para la ocasión
se pueden visualizar las fotografías y
los sonogramas que corresponden a la
vocalizacións característica de cada una
de las especies trabajadas.
3. Algo que llama la atención es que también
encontramos especies que emiten sonidos
no producidos por los órganos bucales,
entre estas están Phleocryptes melanops,
cuyo sonido característicos bien es el
castañeteo que produce con el pico; los
machos de Lesbia nuna y L. victoriae
producen un chasquido con las plumas de
la cola, durante el cortejo y tal vez els
inconfundible es el que produce con las alas
Metriopelia ceciliae, al punto de tener como
otro nombre vulgar el de cascabelita.
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