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REVISTA DE LA FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS AÑO LXX N° 10 / 2018 ISSN 2519-7592
“Antis”, y formaban parte, según los Inkas, de la región del Antisuyo, una de las
cuatro regiones o divisiones políticas, económicas, geográcas y administrativas
del Tahuantinsuyo, posteriormente, en las épocas colonial y republicana, y debido a
la difusión de las crónicas de Garcilaso, se comenzó a emplear el término “Chunchu”
o “Chuncho” para referirse a los pueblos originarios amazónicos.
Durante el periodo colonial (1532 - 1824
(8)
), los pueblos de la región
amazónica sufrieron varios cambios radicales coercitivos en sus territorios, su
régimen económico, su cultura, su cosmovisión, su organización social, sus
costumbres, en resumen, en su vida en sociedad. Los invasores provenientes
de España introdujeron fundamentalmente dos formas de organización social,
el régimen del vasallaje o feudal primero, a imagen y semejanza del europeo, y
después el régimen capitalista incipiente, aunque también en algunos lugares
puso en práctica el régimen esclavista. Junto con estos cambios, los invasores
introdujeron nuevos cultivos, animales e instrumentos de trabajo, así como
también, impusieron, a sangre y fuego, su cultura, sus instituciones políticas, sus
normas jurídicas, sus conceptos de propiedad, territorio y posesión, su religión, su
idioma, sus costumbres y su ideología
(9)
.
Los invasores una vez instalados en territorio peruano, se apresuraron de
reproducir el régimen económico preponderante en España en aquellos años, el
régimen feudal o vasallaje, insertándolo en los rubros de la agricultura, la maderera
y la minería fundamentalmente, utilizando para ello los conocidos “requerimientos
a los indios”
(10)
, implantaron la “encomienda” y las “mercedes”
(11)
. Por otro lado,
los invasores tenían necesidad de legitimar lo que ellos llamaban su propiedad,
entonces recurrieron a las máximas autoridades de España, los Reyes y el Papa, este
último tenía la facultad de emitir bulas refrendando el derecho de apropiación,
(8) Aunque formalmente la declaración de la independencia fue el 28 de julio de 1821, fueron
con las batallas de Junín (6 de agosto de 1824) y de Ayacucho (9 de diciembre de 1824) que se sellaron
denitivamente la independencia del Perú, al menos en términos formales.
(9) “los españoles no solamente introdujeron nuevos cultivos, animales y tecnología, sino que
también trasladaron nuevas instituciones y organizaciones económicas, como la moneda, el trabajo
asalariado, las ciudades y la hacienda o latifundio agropecuario. Dieron inicio a un nuevo sector produc-
tivo, destinado a cumplir un rol protagónico entre nosotros, como la minería, y vincularon a la economía
peruana con el resto del mundo, precisamente de la mano de este nuevo sector”. Extraído de: Noejovich,
Hector, Salazar-Soler, Carmen y otros, “Compendio de Historia Económica del Perú”, Tomo II: Economía
del Periodo Colonial Temprano, Editor: Carlos Contreras, primera edición, Edit.: Banco Central de Reserva
del Perú y el Instituto de Estudios Peruanos, Lima, 2009, pág.: 13.
(10) “La gura institucional que se implementó fue el “requerimiento”. El caudillo español, a
través del notario, requería la conversión a la fe católica: si los indios acataban y, como buenos cristianos
se sometían a la autoridad del rey, se convertían en vasallos de la Corona; caso contrario, había una
“justa causa” para hacerles la guerra y esclavizarlos”. Ídem, pág.: 40.
(11) “La solución al problema de la necesidad de mano de obra para Nueva Castilla, como se de-
nominó inicialmente al futuro virreinato del Perú, fue el desarrollo de la “encomienda” en una escala su-
perior a su instauración en Nueva España. Paralelamente, esta institución, junto con las “mercedes”, fue
una forma de retribución para los conquistadores, independiente del botín que signicaron los repartos
de Cajamarca y el Cuzco”. Ídem, pág.: 41.
La Resistencia del Pueblo Harakbut. El Caso de la Federación Nativa del Río Madre de Dios y Auentes (FENAMAD)
versus Hunt Oil Company, Repsol Exploracion y Pluspetrol Corporation